Sergio García termina satisfecho su primer día en este Open de España. La tarde del jueves le ha deparado una tarjeta de -2 que le sirve para estar entre los 30 mejores del torneo. También para no desentonar con respecto al buen desempeño generalizado de los principales golfistas españoles en la apertura de la competición.
El castellonense ha empezado su vuelta muy serio, haciéndose con un botín de hasta tres birdies en los nueve primeros hoyos. Se ha encontrado con más complicaciones en los nueve últimos, en los que un bogey en el hoyo 13 ha roto la monotonía de pares en la que García se ha movido casi siempre durante la jornada vespertina.
Él se ha visto con fuerzas para pelear por cotas mayores, como el -4 o el -5. No obstante, concluir bajo par en el debut (69 golpes, a 6 del liderato) tampoco está nada mal para las aspiraciones de García, abrumado por el gran apoyo del público madrileño. Nada más guardar los palos, nos ha trasladado sus sensaciones: